“España, con 30.000 puntos de recarga, ya está totalmente preparada para circular con coches 100% eléctricos” 

“Las empresas que equipan a sus plantillas con flotas de vehículos 100% eléctricos son un ejemplo para la sociedad” 

El sector del motor es uno de los más castigados por la incertidumbre vivida en los últimos años. La inflación y la inestabilidad geopolítica, marcada por diferentes conflictos tanto a nivel europeo como global, han obligado a las empresas a adaptar sus estrategias a un mercado rápidamente cambiante. En este contexto, la tendencia cada vez más real hacia la electrificación del parque automovilístico ha acelerado su penetración en la movilidad no ya del futuro, sino del presente. 

Polestar, nacida como marca en 1996 y refundada en 2015 tras ser adquirida por Volvo y que volvió a ser marca independiente en el 2017 busca dar respuesta a aquellos conductores que quieren un vehículo 100% eléctrico con mayor valor añadido: más autonomía (el caballo de batalla de esta modalidad de conducción), mejores prestaciones y un diseño premium. Capital analiza el mercado con Stéphane Le Guevel, CEO de la compañía sueca en el mercado ibérico (España y Portugal). 

¿Qué tal se está comportando el mercado de vehículos eléctricos?

El mercado europeo de vehículos eléctricos cierra el año con un crecimiento cercano al 20%, lo cual representa un dato muy positivo y realmente esperanzador. Si nos centramos específicamente en el mercado español, vemos que ha superado las previsiones que todos teníamos y terminará por encima del 5%. O sea, que esta cifra confirma que, a pesar de que España va con retraso, va por el buen camino. 

¿Qué fortalezas y amenazas detectan?

Como fortalezas, destacaría la amplia oferta actual que observamos en el mercado, muy interesante para los clientes. La mayoría de los fabricantes del sector ya está proponiendo vehículos 100% eléctricos muy interesantes, con muy buenas autonomías. 

Por otro lado, observamos y constatamos nuestro convencimiento de que todo aquel que prueba un vehículo eléctrico se convence de sus ventajas y no vuelve a apostar por vehículos de combustión. Este punto es muy positivo para la industria. 

En cuanto a las amenazas, destacaría principalmente algunos posibles ‘frenos’ al crecimiento, que realmente se corresponden con casi todas las iniciativas innovadoras: Concretamente, el propio proceso de cambio, el miedo a lo desconocido y la incertidumbre que se crea con algunas noticias negativas muy sensacionalistas. 

La reciente reforma del mercado eléctrico europeo, ¿afecta en algo al mercado de vehículos eléctricos? 

Obviamente, la reforma europea afecta positivamente al sector, ya que todo lo que sea estabilizar y controlar el precio de la electricidad genera confianza a los clientes. De la misma manera, todo lo que sea desplegar energías renovables hace que tenga más sentido esa transición hacia el vehículo eléctrico. 

¿Esperan cambios regulatorios adicionales que puedan favorecer la mejora del nicho del vehículo eléctrico? 

Vemos que, en todos los demás países europeos, que van mucho más adelantados que el español en cuanto a electrificación del automóvil, en cuanto pasan del 5% en cuota de vehículos eléctricos, el crecimiento ha sido exponencial. 

Creo que ya no debemos hablar de ‘nicho’, sino de una realidad que en breve será la protagonista principal del sector. Dicho esto, esperamos que al menos las medidas regulatorias que se han tomado tengan continuidad y se simplifiquen en el futuro. 

¿Cómo ven el mercado español en comparación con otros mercados europeos? 

Además de lo comentado anteriormente sobre su evolución positiva, creo que es importante hablar de un punto con el que se nos compara sistemáticamente con los otros países europeos. Concretamente, se trata de la infraestructura de puntos de carga publica que tanto asusta a la gente y que genera tanta inquietud. Solo en este último año se han activado unos 12.000 puntos de recarga, lo que supone el 40% de la carga publica que hay en España. 

Hoy por hoy, España, con aproximadamente 30.000 puntos de recarga, ya es un país totalmente preparado para circular con coches 100% eléctricos. Y si encima lo haces con un vehículo como nuestro Polestar 2 que ofrece hasta 655 kilómetros de autonomía, aún más fácil. 

Ya sabemos que, en España, somos ‘estudiantes de última noche’, pero que luego sacamos matrícula de honor en los exámenes. 

¿Cree que el ciudadano o el conductor está suficientemente concienciado de la importancia de que la movilidad sea 100% eléctrica en un futuro? 

Creo que estamos en un momento en el que el ciudadano lo tiene asumido, pero aún no está concienciado de la importancia ni de su beneficio a nivel personal. Falta pedagogía y falta concienciación. 

Por desgracia, observamos que se ha politizado la transición hacia la movilidad eléctrica, que se está viviendo más como una imposición desde las instituciones e impide que seamos conscientes de las ventajas que nos aporta a todos.  

¿Cómo podemos cambiar la mentalidad del mercado? 

 Es un trabajo de todos. Nuestro papel, el de los fabricantes y el de las administraciones, es evidente, pero me parece fundamental el vuestro, el de los medios de comunicación que tanta influencia tenéis ante un cambio tan importante. 

Vemos muchas noticias falsas y muchas informaciones exageradas que lo único que amplifican es el miedo y resistencia al cambio. Por otro lado, otro actor crucial en este proceso de cambio son las empresas. Creemos que las decisiones dirigidas a equipar a sus empleados con flotas 100% eléctricas son un buen ejemplo para el resto de la sociedad. 

“Somos 100% eléctricos desde nuestros inicios, no por imposiciones reglamentarias europeas” 

La marca sueca ultima el lanzamiento de los modelos Polestar 3 y Polestar 4, que llegarán a España antes del verano de 2024. En este contexto, Stéphane Le Guevel hace balance de los dos primeros ejercicios de la firma en nuestro país. 

La madurez del mercado es la que suele determinar el éxito de una propuesta de valor con vocación innovadora, como es el caso de Polestar. En el caso de España, ¿qué balance hacen de los dos primeros años de la marca en nuestro país? 

Cuando desembarcamos en España, teníamos tres objetivos principales. El primero era en dar a conocer la marca y posicionarla en el mercado de vehículos 100% eléctricos con características y prestaciones premium. 

El segundo reto fue desarrollar nuestra red de Spaces, los showrooms tan específicos de Polestar (ya hay cinco en España), mientras que el tercero era incluir los vehículos de la marca en la parrilla de un máximo de empresas. Os puedo decir que en los tres desafíos hemos superado ampliamente nuestras ambiciones. 

¿Cómo definiría al cliente ‘modelo’ de Polestar? 

El cliente Polestar es una persona comprometida con el medio ambiente, que busca un vehículo 100% eléctrico sin renunciar al diseño y a las prestaciones deportivas. Tiene un perfil de ‘early adopter’ (usuario pionero de nuevos productos o servicios), ya que la tecnología está en nuestro ADN desde los inicios, siendo los primeros en embarcar Google Automotive Service por ejemplo. 

¿Qué diferencia a Polestar? 

El primer elemento diferenciador es nuestro principal objetivo, que es promover y acelerar el paso a una movilidad 100% eléctrica. No estamos transformando nuestra empresa o gama de productos para responder a exigencias o imposiciones reglamentarias europeas. Somos así desde nuestros inicios y estamos convencidos de que para proteger nuestro planeta hay que actuar urgente y activamente.  

El sector del transporte es el que más está aumentando sus emisiones de gases de efecto invernadero y se espera que en el futuro suponga más del 30% del total de emisiones. Polestar tiene el objetivo de eliminar el carbono de toda la cadena de suministro y el proceso de fabricación. Así nace nuestro proyecto ‘Polestar 0’, que responde al ambicioso objetivo de crear el primer vehículo de serie climáticamente neutro antes de 2030.  

Dicho esto, sin lugar a dudas lo que nos diferencia es nuestro producto, que es el centro de todo lo que hacemos. Nuestros coches se caracterizan, primero, por la fuerte personalidad de su diseño. Nuestro CEO, Thomas Ingenlath, es diseñador de profesión, por lo que el diseño esta omnipresente en todo lo que hacemos. Además, nos diferencia nuestro espíritu de deportividad, ya que nuestra marca nació como marca de racing, pero también por nuestra tecnología y conectividad. 

Además, somos una marca que ha nacido digital. Proporcionamos al cliente la posibilidad de informarse sobre la firma y poder comprar un Polestar desde donde quiera y cuando quiera. No obstante, no queremos privar a nadie de la experiencia física de ver, tocar y probar un Polestar sin ninguna presión comercial. 

Pretendemos poner a disposición de los clientes todas las herramientas necesarias (ya sean digitales o físicas) para ayudarle en su decisión de compra. El cliente es libre de elegir la forma con la que quiere interactuar con la marca. 

¿Qué beneficios aporta trabajar con una marca consolidada como Volvo? 

Entre Polestar y Volvo hay muchas sinergias. Por un lado, la fabricación y logística a nivel internacional. Por otro, el desarrollo de motores y toda la parte de seguridad, en la que sabemos que Volvo es una referencia en el sector. Y, por último, la postventa, ya que nos apoyamos en los casi 80 puntos de servicio de Volvo para dar total tranquilidad a nuestros clientes. 

¿Nos puede adelantar alguna novedad o algún lanzamiento previsto paga los próximos meses? 

Lanzamos la marca en el mercado español hace un año y medio con el Polestar 2, nuestro modelo con carrocería fastback, que, con sus 655 km de autonomía se convierte en el ‘best in class’ (el mejor de su clase) dentro de su segmento.  

El Polestar 3, que comercializamos desde octubre del 2022, es el primer SUV de la marca. En este vehículo aerodinámico, con 380 kW/517 CV de potencia, el minimalismo escandinavo se combina con los ingredientes básicos de un vehículo utilitario deportivo para definir el concepto de SUV en la era eléctrica.  

Durante el primer trimestre del 2024, llegará también el Polestar 4, un SUV Coupé transformado que se caracteriza por su luneta trasera virtual y un avanzado espejo retrovisor virtual. Para el segundo semestre, presentaremos el Polestar 5, un GT eléctrico de cuatro puertas inspirado del concept car Precept. 

El Polestar 2 y el Polestar 3 ya se pueden reservar y probar en España a través de nuestra web Polestar.com. 

“Hemos posicionado el mercado español en el puesto que se merece” 

¿Cuál quiere que sea su legado en Polestar? 

Mi objetivo es haber contribuido a hacer de Polestar en España un actor creíble y clave de la transición hacia una movilidad sostenible y posicionar al mercado español en el puesto que merece dentro de la clasificación de mercados europeos de Polestar. Concretamente, en el Top 5. 

¿Qué huella quiere dejar en el mercado automovilístico? 

Dados mis antecedentes internacionales, me gustaría encarnar la prueba de que lo que nos une es más fuerte que lo que nos separa. Con pasión, compromiso y trabajo en equipo, podemos conseguir grandes cosas, sea cual sea nuestro origen o cultura. 

¿Y en la sociedad? 

La de un hombre honesto que actúa con convicción y pasión por sus valores. 

¿Tiene usted algún referente empresarial, alguien que le inspire? 

Steve Jobs, por lo que ha conseguido con Apple, transformando nuestra vida cotidiana. Creo también que Polestar comparte muchos puntos con Apple: el diseño, el minimalismo, la performance, la tecnología, el modelo de negocio…